lunes, 28 de junio de 2010

BOLIVIA: TOO MUCH! POTOSÍ, SUCRE, LA PAZ

Estamos en La Paz, la capital de Bolivia. Este país se nos está haciendo muy dificultoso para el pedaleo, por la altura, las cuestas y el estado de las carreteras.
Dejamos la ciudad de Uyuni con previsión de pedalear 3 o 4 días hasta Potosí. El primer día fue un infierno: hicimos 85kms por una carretera de un ripio malísimo que sólo hacía que subir a 4200m, descender a 3600m para volver a ascender… con el añadido de que estaba en obras, así que cada dos por tres nos debíamos desviar por tramos de tierra arenosa que hacían aún más penoso el avance.
Llegamos hasta Tica Tica, un pueblecito donde caímos rendidos. Eso sí, la ruta fue interesante porque atravesamos zonas mineras y la tierra y las montañas adquirían mucho colorido.
Al día siguiente nos esperaba más de lo mismo: lento avance en ascenso y descenso. Un problema añadido es la altura- aunque ya llevábamos bastante por aquí arriba se sigue notando la lentitud y el cansancio a la hora de hacer esfuerzos. Otro es que en otras ocasiones habíamos tenido una etapa dura pero al día siguiente se suavizaba… pero en este caso la dificultad era constante.
Con todas esas premisas, el segundo día hicimos 60kms y añadiendo el agotamiento a la previsión de un tercer día con las mismas características, decidimos hacer auto-stop para los últimos 60kms y un pick up nos llevó muy amablemente hasta Potosí. Estábamos exhaustos.
En Potosí admiramos la situación de la ciudad, colgada de las laderas del Cerro Rico, la mina de la que antaño se extrajeron miles de toneladas de plata pero que hoy en día es un conjunto de desmontes y terraplenes- no debe quedar un ápice del dibujo original de la montaña. Aún así es impresionante ver su perfil desde cualquiera de las callejuelas de la ciudad.
Desde Potosí viajamos en un día hasta Sucre, ciudad colonial blanca. Nos parecía estar en cualquier pueblecito de Andalucía!
De vuelta a Potosí, y recordando la dureza de los días de pedaleo hasta llegar allá, decidimos tomar un bus que nos saltara la parte montañosa que faltaba y nos dejara directamente en el altiplano. Así que desembocamos en Oruro, donde con gran alegría de Carlos pudimos comprar un montón de petardos de todo tipo por sólo 20 bolivianos (unos 3 euros), que lanzamos en Sica Sica, pueblito donde nos encontramos la noche de San Juan.
Otros ciclistas nos habían comentado que en Bolivia sólo se alimentaron de arroz y pollo, y nosotros veníamos un poco ya mentalizados a eso, pero sorprendentemente estamos comiendo la mar de bien. En cualquier lugar hay alguien cocinando en la calle: sólo hay que elegir la comida que se vea menos grasienta. También hacen zumos y batidos por doquier. Por 4 bolivianos (0,5 euros) nos tomamos unos vasos enormes de batido de plátano o papaya deliciosos!! También hay empanadas muy ricas, que aquí llaman salteñas, unos aguacates grandes como melones, frutas desconocidas… vamos, que estamos encantados!!! Porque en Bolivia todo sucede en la calle. Está repleto de puestecillos ambulantes que venden zumos, ropa, artículos electrónicos, salchipapas, helados… lo que quieras. Aquí todo el mundo te vende algo!
El día que llegamos a la Paz fue también bastante duro, especialmente porque cada vez habían más vehículos en la ruta y aquí la gasolina debe ser de dudosa calidad y los motores de los coches no queman del todo bien, con lo que nos atufaban a CO2. Recordamos que teníamos unas mascarillas en el neceser y decidimos hacer uso de ellas, en conmemoración del aniversario de la muerte del rey del pop.
La llegada a la Paz desde El Alto es un descenso muy agradable de más de 10kms, ya que la ciudad se encuentra en un hoyo rodeada de montañas repletas de casitas. Lo divertido es que para salir de la ciudad deberemos pedalearlo a la inversa, es decir, cuesta arriba.
Aquí hemos dado con una casa de ciclistas, regentada por Cristian y Luisa, donde estamos alojados junto con dos chicos colombianos, Juan y Jaime, con los que ya habíamos sufrido las cuestas de Uyuni a Potosí. Vamos a quedarnos unos días en la ciudad, ya que hay bastante que hacer, entre otras cosas ver los partidos del mundial desde una pantalla gigante que está muy cerca de casa, y posiblemente hagamos algun trekking por las montañas- puede que ascender hasta la cota 6000- antes de continuar ruta hasta Copacabana, en el lago Titicaca.

lunes, 14 de junio de 2010

¡HOLA BOLIVIA! SUD LIPEZ Y SALAR DE UYUNI

Ya estamos en Bolivia!!! Al despedirnos de Ana y Javier, retomamos el pedaleo con ganas de pasar a Bolivia. Para ello, había que salvar 2.400m de desnivel (de los 1.200 m que está Jujuy hasta los 3.600m de la frontera) en poco menos de 300 km ascendiendo por la Quebrada de Humahuaca hasta llegar a la puna. Es una larga pero no muy pronunciada subida que te sitúa en el altiplano, donde estaremos los próximos meses. Este recorrido nos llevó 4 días, donde pasamos por Tilcara, Humahuaca y Abra Pampa; también denominada la Siberia Argentina. Y es que, pasando los 3.000m, hace frío. De día, cuando calienta el sol, la temperatura es aceptable, pero a la que se pone hace mucho mucho frío. A pesar de haber atravesado el Trópico de Capricornio, con lo que se puede decir que estamos en el “trópico”, no deja de ser invierno. Además, se nota también la falta de oxígeno por lo que hace que el pedaleo sea también algo más lento.

De esta manera, el cuarto día llegamos a la frontera, donde del lado argentino disfrutamos nuestra última milanesa napolitana, la cual quedó muy alta en el ranking.
En este punto Argentina y Bolivia están separadas por un puente: del lado argentino está La Quiaca y del boliviano Villazón. Allí nos alojamos en el Hotel Palace –para que veáis que no reparamos en gastos, un cuchitril con nombre grandilocuente- y sacamos los billetes para ir en tren hasta Tupiza, punto de partida del Tour de 4 días en 4x4 que nos llevaría por el Sud Lipez hasta el Salar de Uyuni.
En el tren conocimos a David, un chico español que viaja a mochila por aquí. Decidimos buscar juntos la agencia con la que realizar el tour, y fue una aventura en sí misma. Acostumbrados a alejarnos de los sectores turísticos y poco dados a contratar excursiones, resultó muy estresante: regateo de precios, comparación de agencias, acoso e incluso chantaje por contratar el tour… Finalmente, formamos un grupo de 2 jeeps en el que íbamos 4 americanos, 1 canadiense y nosotros tres. Cada jeep cuanta con su chofer-guía y una cocinera que va preparando de todo (hemos comido de cine!)
El tour en sí es muy interesante aunque agotador: todos los días te levantan alrededor de las 5:30 am, cuando todavía no ha salido el sol y hace un frío de -5 a -10º porque duermes a más de 4.000m.
Recorrimos las montañas de Lipez; el parque natural Eduardo Avaroa, con sus impresionantes lagunas, geisers, volcanes, desiertos…. Unos paisajes increíbles. Estamos contentos de no haberlo intentado en bici, ya que los desniveles son enormes, los lugares donde abastacerse muy escasos y el frío muy desagradable.
También hemos visto todo tipo de fauna: llamas, vicuñas, vizcachas, cóndores...
De esta manera, el cuarto día madrugamos para ver la salida del sol en el salar y desde la isla Incahuasi (casa del inca) nos despedimos de nuestros compañeros de tour y pedaleamos los 100 km que la separan hasta la ciudad de Uyuni. Es impresionante pedalear por el salar, con el horizonte limpio y silencio absoluto -sólo el crujir de los cristales de sal bajo las ruedas-.
El siguiente paso será Potosí, que creemos llegar en unos 4 días de pedaleo y donde visitaremos la ciudad colonial y las Minas del Cerro Rico, y probablemente desde allí nos escapemos a conocer Sucre.

viernes, 4 de junio de 2010

ANA Y JAVIER!

Hola a todos!
Desde la última actualización hemos pedaleado muy poquito, sólo los 93 kms que separan Salta de Jujuy junto con Janine y Thomas, con quienes celebramos las fiestas de la víspera del bicentenario de la nación argentina.
El día 25 de mayo dejamos las bicis y alforjas a buen recaudo en un hostel de San Salvador de Jujuy para viajar en bus hasta San Pedro de Atacama, donde nos encontramos con Ana y Javier, los padres de Carlos.
El trayecto en bus, que atraviesa el llamado Paso de Jama, es una aventura en sí mismo: asciende rápidamente a 4000 metros en la llamada cuesta de Lipán y a partir de allí se mantiene en el altiplano atravesando puna y salares.
La frontera argentina se encuentra a 4300m, y haciendo la cola para que nos sellaran el pasaporte, ambos notamos cierto apunamiento o mal de altura. Nos tomamos sendos tés de coca, legales en Argentina en su consumo pero no en su producción, que viene de Bolivia, y parece que algo nos alivió. Unos niños que viven en unas casetas al lado del puesto fronterizo, en medio de la nada y con unas condiciones climáticas extremas, nos regalaron una banderita de argentina para celebrar el día del bicentenario.
Seguimos atravesando puna hasta descender súbitamente hasta los 2500m de altura en la que se encuentra San Pedro. Allí nos encontramos con Ana y Javier y lo celebramos como se merece.
En un par de días atravesamos el Valle de la Muerte, visitamos el Valle de la Luna e incluso nos levantamos a las 4 de la mañana para llegar al amanecer a los geisers del Tatio, supuestamente la mejor hora para verlos porque es cuando más contraste de temperatura hay entre los 85ºdel agua que emerge y la incómoda gelidez del amanecer.
El día 28 atravesamos de nuevo el paso de Jama y llegamos a Salta, donde el día 29 celebramos con una riquíssima parrillada el cumpleaños de Sonia.
Al día siguiente alquilamos un coche para recorrer en unos días, junto con Ana y Javier, la Quebrada de las Conchas y los Valles Calchaquíes: Cafayate (esta vez sin damajuana… visitamos bodegas y bebimos vinos de mejor calidad), Angastaco (donde comimos de nuevo la milanesa napolitana número 1 del ranking!), Molinos, Cachi y el descenso de la cuesta de Obispo. Eso sí, cambia mucho hacer el mismo trayecto en bici que en coche… no se aprecian las cuestas de la misma manera!!
Hoy nos hemos despedido y mañana reempredemos la ruta en bici, que se va a hacer muy dura después de 10 días sin pedalear y con 4 jornadas cuesta arriba hasta la frontera boliviana!!

Don't cry for me Argentina.....